El anillo se ha usado desde hace siglos, pero no es un simple accesorio ya que detrás de este hay compromisos, logros, creencias… tener un anillo puede significar estar casado, gradado, amistad, cultura. Por eso, aquí te damos a conocer las reglas básicas a la hora de usar anillos.
LOS ANILLOS ENVÍAN UN MENSAJE
Nunca pasan desapercibidos, las personas siempre notan cuando traes un anillo y deducir tus gustos, tus creencias, si estas comprometido y hasta si eres una personas adinerada. Si te estás iniciando en el mundo de los anillos, recuerda que menos es más. Si no sabes si vas a tener la seguridad necesaria para llevar una colección en tu mano (o piensas que te va a resultar incómodo), será mejor que te limites a llevar solo uno o dos. Concéntrate en una mano y póntelos en dedos que no se rocen.
DEBEN TRANSMITIR SEGURIDAD
Las personas suelen preguntar por el anillo, entonces debes estar preparado para responder esas peguntas, su significado, el por qué lo usas, dónde lo compraste.
EL TAMAÑO DE LAS MANOS Y LA COMODIDAD
Un error fatal es usar anillos grandes en manos pequeñas y viceversa, lo ideal es usar anillos pequeños en maños pequeñas y anillos grandes en manos grandes. La comodidad y la seguridad van de la mano. Es difícil sentirse seguro si tus dedos llevan una carga demasiado grande y te molestan.
¿Con qué mano trabajas?
¿Das mucho la mano?
¿Tienes que usar el teclado durante todo el día?
¿Es necesario que te vistas de una manera determinada para ir a tu trabajo o centro de estudios?
Responder a estas preguntas te ayudará a decidir cuántos anillos te puedes poner, así como su tamaño. Siempre puedes reservar las piezas más llamativas para la noche y usar las más sencillas y pequeñas durante el día.
MANTENER UN EQUILIBRIO
Si decides utilizar otro accesorio se debe mantener un equilibrio en las dos manos, no cargar una con dos o más anillos y un reloj y la otra sin nada.
¿Llevas un anillo de boda y un reloj en una mano? Entonces ponte dos anillos en la otra. La idea es que ambas manos o muñecas no estén adornadas de la misma manera.
Si solo llevas un anillo (aparte de tu alianza), juega un poco y mira a ver qué tal queda en la otra mano. Puede que te quede mejor si te lo pones en el mismo lado que el anillo de boda. El espejo puede ser tu mejor amigo aquí… e incluso tu mejor amigo puede hacer de espejo para ti; no tengas miedo de pedir ayuda.
La cuestión del equilibrio también aplica al tamaño de los anillos. Si tus dedos son gordos, los anillos grandes parecerán proporcionales a los mismos, lo contrario que sucede si tus dedos son finos y alargados.
